La labor del Juzgado especial que trabaja sobre el atentado que fue objeto el digno juez de este partido, don Francisco Ximénez de Embun, ha sido improba y fructuosa.
Se ha comprobado que los agresores son los detenidos, pues el agredido por dos veces los ha reconocido sin titubear. También los han reconocido varios testigos oculares del hecho, además un campesino al que se dirigieron aquellos al llegar a esta ciudad, y al que suplicaron les orientase, pues habian llegado aqui procedentes de la capital a las ocho de la manana.
Se ha comprobado que los detenidos, aunque negaban conocerse, eran amigos entre sí, y vecinos José Dalmau y Vicente Bros, en contra de lo que ellos sostenían, este extremo lo comprobó la policía cumpliendo órdenes telegráficas del juez señor León.
Igualmente comprobó la policía, en registros practicados en los domicilios de aquellos, que uno de los detenidos que afirmaba haber pasado la noche con su esposa vive separado de ella y que capitaneaba el grupo José Dalmau.
Se reconstituyó el itinerario seguido por los agresores, después de cometido el atentado, y varias mujeres reconocieron al citado Dalmau por el sujeto que disparó sobre el juez, cuando este ya estaba herido en el suelo.
Otros extremos de suma importancia, que la discreción veda publicar, fueron comprobados por documentos y declaraciones recibidas que evidenciaban la falsedad de las declaraciones prestadas por los detenidos, en las que han incurrido en gran número de contradicciones de suma importancia.
La agresión la llevaron a cabo los procesados, en unión de otros que lograron huir, divididos en dos grupos que apuntaron a la víctima unos a la mitad inferior del cuerpo y otros a la mitad superior.
Esto fué lo que salvó la vida al señor juez, pues en el primer disparo recibido en la pierna izquierda que le hizo caer en el mismo momento en que otra bala le rozaba la cabeza.
El Juzgado ha trabajado con tanto celo, actividad e inteligencia que puede darse por casi terminado el sumario, calificando el hecho como atentado, disparo y lesiones graves.
Cada dia se tienen noticias en esta ciudad del estado del herido, y se publican en los diarios locales el parte facultativo del doctor Esquerdo, quien, afortunadamente, sigue mejor de sus heridas sufridas.
Por prescripción del citarlo facultativo está completamente prohibido visitar al herido. Solamente
es permitido a sus amigos interesarse por teléfono del estado que se encuentra tan ilustre personalidad.
—Alas.
Se ha comprobado que los agresores son los detenidos, pues el agredido por dos veces los ha reconocido sin titubear. También los han reconocido varios testigos oculares del hecho, además un campesino al que se dirigieron aquellos al llegar a esta ciudad, y al que suplicaron les orientase, pues habian llegado aqui procedentes de la capital a las ocho de la manana.
Se ha comprobado que los detenidos, aunque negaban conocerse, eran amigos entre sí, y vecinos José Dalmau y Vicente Bros, en contra de lo que ellos sostenían, este extremo lo comprobó la policía cumpliendo órdenes telegráficas del juez señor León.
Igualmente comprobó la policía, en registros practicados en los domicilios de aquellos, que uno de los detenidos que afirmaba haber pasado la noche con su esposa vive separado de ella y que capitaneaba el grupo José Dalmau.
Se reconstituyó el itinerario seguido por los agresores, después de cometido el atentado, y varias mujeres reconocieron al citado Dalmau por el sujeto que disparó sobre el juez, cuando este ya estaba herido en el suelo.
Otros extremos de suma importancia, que la discreción veda publicar, fueron comprobados por documentos y declaraciones recibidas que evidenciaban la falsedad de las declaraciones prestadas por los detenidos, en las que han incurrido en gran número de contradicciones de suma importancia.
La agresión la llevaron a cabo los procesados, en unión de otros que lograron huir, divididos en dos grupos que apuntaron a la víctima unos a la mitad inferior del cuerpo y otros a la mitad superior.
Esto fué lo que salvó la vida al señor juez, pues en el primer disparo recibido en la pierna izquierda que le hizo caer en el mismo momento en que otra bala le rozaba la cabeza.
El Juzgado ha trabajado con tanto celo, actividad e inteligencia que puede darse por casi terminado el sumario, calificando el hecho como atentado, disparo y lesiones graves.
Cada dia se tienen noticias en esta ciudad del estado del herido, y se publican en los diarios locales el parte facultativo del doctor Esquerdo, quien, afortunadamente, sigue mejor de sus heridas sufridas.
Por prescripción del citarlo facultativo está completamente prohibido visitar al herido. Solamente
es permitido a sus amigos interesarse por teléfono del estado que se encuentra tan ilustre personalidad.
—Alas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario