El quinto aniversario
del 13 de septiembre
En Tarrasa
Con
motivo de la celebración del V Aniversario del advenimiento al poder del
ilustre general Primo de Rivera, nuestras calles desde las primeras horas de la
mañana se vieron sumamente concurridas, pues llegaban en grandes autocares,
diferentes representaciones de los distintos pueblos, para sumarse a los
festejos anunciados.
A
las once de la mañana los salones del Ayuntamiento eran a todas luces
insuficientes para contener el sinnúmero de personalidades e invitados al acto.
Después
se formó la comitiva que en procesión cívica, se dirigió a los Jardines del conde
de Egara; formaba la cabeza de la misma nuestra tropa de exploradores con la banda
de trompetas y tambores, banda municipal y la presidencia integrada por el ex presidente
de la Mancomunidad, Excmo. señor don Alfonso Sala, conde de Egara, el alcalde
don José Ullés Jover, el comandante militar, don Agustín Baca; el juez de
primera instancia don José Farré Duat; el juez municipal, don Salvador Utset;
el prior arcipreste, doctor Molera; el rector del Real Colegio de las Escuelas
Pías, Rdo. P. don Adolfo Roger; los diputados provinciales señores Torrens y
Vancells Carreras; cabo de
somatén
don José Guillemot; presidente de la Caja de Ahorros, don Francisco Salvans; el
Inspector del Trabajo, don Roberto Pérez Honduvilla; luego seguían por el orden
prefijado las distintas entidades locales: comercio, industria, banca,
ciencias, artes, etc. en una palabra, todo cuanto representa factores de
producción y riqueza; seguían luego por el orden alfabético las comisiones de cada
pueblo con las respectivas banderas de las Uniones Patrióticas al frente y por
último una gran masa obrera.
Una
vez llegados a los Jardines del conde de Egara, en donde también se hallaban reunidos
unos 3.000 niños y niñas de las escuelas municipales, se celebró la. santa misa
por el capellán muy ilustre señor reverendo don Juan Gilart Brogué, predicador de
S. M.; durante la misma, bajo la batuta del maestro Serrat, nuestra banda
municipal dejó oir varios motivos de Schubert y Beethoven.
Terminada
la misa, el celebrante dirigió la palabra al numeroso público, que llenaba incluso
los paseos laterales, glosó con palabra bien timbrada lleno de unción, los
santos conceptos patriótico-religiosos, terminada la cual fue destacada del
grupo de banderas de la U. P. la de esta ciudad, que fue bendecida por el
citado sacerdote; inmediatamente después se dieron vivas a nuestros Reyes y al
general Primo de Rivera.
Como
prueba de adhesión al acto todas las casas por donde pasó la comitiva lucían en
sus balcones hermosas colgaduras.
El
señor alcalde dio las gracias a todos e inmediatamente empezó un concierto dado
por la banda municipal.
No hay comentarios:
Publicar un comentario