Lluís Muncunill (1868-1931) es un referente de la arquitectura industrial de Terrassa que adapta el estilo modernista a la arquitectura industrial. Entre 1892 y 1903 fue arquitecto municipal, y fue el más prolífico que ha tenido Terrassa. Creó edificios para los usos más diversos y definió diferentes tipologías de edificios industriales. La variedad constructiva le permitió configurar la imagen urbana de la Terrassa modernista, recurriendo a la utilización de cubiertas con vueltas de ladrillo plano, sujetadas con tirantes de hierro, soportadas por pilares de hierro colado.
La construcción de la Terrassa industrial
Terrassa es una ciudad conocida desde antiguo por la calidad de sus manufacturas textiles. A mediados de siglo XIX vivirá un gran desarrollo industrial gracias a la aplicación de la máquina de vapor como fuerza motriz y a la sustitución de los telares manuales por los telares con mecanismo Jacquard.
El plan urbanístico del alarife Miquel Curet marcó las pautas de crecimiento de la ciudad. Miquel Curet finaliza su Plan en el año 1879 en sintonía con el de otras ciudades catalanas, como el Plan Cerdà en Barcelona. En los últimos años del siglo XIX, Terrassa se expande hacia el sur, hasta superar la carretera de Montcada y hacia el norte, gracias a la construcción de la estación de ferrocarril. Aparecen nuevos barrios que acogerán las nuevas fábricas, favorecidos por la construcción del puente del Paseo y por la cobertura de la Riera del Palau. Es sobre esta trama urbana donde Lluís Muncunill situará su obra arquitectónica.
Lluís Muncunill en Terrassa
Lluís Muncunill i Parellada nació el 25 de febrero de 1868, en una antigua casa solariega del término de Sant Vicenç de Fals, cerca de Manresa. Estudió en el colegio de Sant Ignasi de esta ciudad y, acabados los estudios de arquitectura en el año 1891, se trasladó a Terrassa. Tres años más tarde contrajo matrimonio con Àngels Palet pubilla de la casa de este nombre y vivió en Terrassa hasta su muerte. En los primeros años de profesión trabajó según los estilos históricos y desde 1903 desarrolló un lenguaje arquitectónico cada vez más creativo.
Una nueva arquitectura industrial
Lluís Muncunill define diferentes tipologías de edificios industriales y desarrolla soluciones constructivas más interesantes en las fábricas alejadas del nucleo urbano. La funcionalidad de los edificios industriales y sus conocimientos técnicos le permiten crear construcciones industriales de grandes dimensiones. Sin embargo,los almacenes son cada vez más lujosos para impresionar a los clientes en las transaciones comerciales, exhibian en sus fachadas las formas más arriesgadas del modernismo. El factor común es la utilización de cubiertas con bóvedas de ladrillo plano.
Las viviendas burguesas y las “casas baratas”
Las viviendas, excepto en casos excepcionales, presentan las dimensiones de un “casal”, la repetición del cual dota a la ciudad de una gran armonía urbana. La distribución interior de las viviendas era muy simple: un cancel con el “cuarto de reja”, el pasillo con las habitaciones y al fondo el comedor y los servicios. Este esquema se reproduce a distintas escalas desde las casas burguesas a las promociones de viviendas obreras. La dignificación de las viviendas de los trebajadores, llamadas “casas baratas”, es una constante en esta época.
Una extensa producción
Lluís Muncunill transformó la ciutad de Terrassa. Trabajó también en Rubí, Manresa, Ripoll, Matadepera, Montserrat y Ullastrell. A partir de los fondos municipales se ha podido documentar una parte de la obra immensa que Lluís Muncunill produjo, principalmente en Terrassa. Hasta 1903, fue el único arquitecto municipal con residencia en la ciudad. Realizó planes urbanísticos, puentes, edificios públicos y religiosos, fábricas, almacenes y todo tipo de viviendas. Además de las construcciones nuevas, hizo reformas importantes y pequeñas intervenciones. Fue también arquitecto municipal de Rubí (1892-1925) y de Manresa (1924-1925).
El arquitecto y la ciudad
Las poblaciones de origen rural como Terrassa, tenian una parcelación que definia solares de unos cinco metros de anchura, el “casal”, la medida común de las vigas de madera. La imposición espacial del “casal” no evitó a Lluís Muncunill desarrollar un amplio abanico de soluciones arquitectónicas, siempre a la búsqueda de una composición estética armónica. La anchura de les fachadas de los edificios de viviendas, fábricas y almacenes situados en un entorno urbano respondía a la pauta de múltiplos de cinco metros. Las construcciones tenían medidas de uno, dos o tres “casals” según las posibilidades económicas de sus propietarios.
Lluís Muncunill configura la imagen urbana de la Terrassa modernista, es el arquitecto más prolífico que ha tenido Terrassa. Trabajó durante cuarenta años, hizo todo tipo de edificaciones en una època en que la ciudad creció desmesuradamente. Por otra parte, entre 1892 y 1903, los años en que fue arquitecto municipal, hizo diversos planes urbanísticos, alrededor del cauce de la Riera del Palau, futura Rambla d’Ègara. Asimismo, otros arquitectos como Antoni Pascual, Melcior Viñals y Josep M. Coll i Bacardí también han dejado su huella en la Terrassa modernista
1 comentario:
Salva ""miarma"" esto si...esto si que me gusta y lo mirare detenidamente...UN beso y gracias por compartir con tus amigos tu ciudad.....
Maria
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