Al
conocerse la noticia en esta ciudad de
que Su Majestad había firmado el nombramiento de senador vitalicio a favor del
ilustre patricio tarrasense don Alfonso Sala y Argemí, fueron muchas las
personas que se trasladaron al domicilio del actual diputado a Cortes para felicitarle
y significarle que el gobierno actual, por vez primera, había hecho justicia a
los méritos que, con la patria, tiene contraídos tan significada personalidad.
Hoy los concejales
monárquicos de nuestro Ayuntamiento han visitado al señor Sala para felicitarle
y al propio tiempo darle copia de los telegramas dirigidos al Rey y al
presidente del Consejo de ministros por haber otorgado tan alta distinción a un
catalán, de tanto abolengo, como es el comisario regio de las Escuelas Industriales.
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