Cegados por torpes egoísmos, los hombres de generaciones pasadas consideraban a la mujer como un objeto de lujo y placer.
Hasta los más conspícuos padres de la Iglesia la dedicaban los insultos más soeces y la sometían a los escarnios más grandes.
Nadie ha hablado de la mujer como todos esos santos, a los cuales la mayoría de vosotros veneráis con gran respeto en esas casas conocidas por ... iglesias.
Y para que os forméis un pequeño juício de lo que, respecto a la mujer, opinaban los padres del cristianismo, copio varios de los más salientes de sus pensamientos:
"La mujer es el origen de todos los males, pues ella ha penetrado la muerte en el mundo".- San Jerónimo.
"Malo es ver a mujer alguna, peor hablarla y más tocarla".- San Agustín.
"Hombre de bien, huye de la mujer, sino eres perdido".- San Paulino.
"La mujer es un escorpión pronto siempre a picar ... Es la lanza del demonio",- San Buenaventura.
"Más difícil es hallar una mujer buena que un cuervo blanco".- San Gregorio.
"La mujer no tiene sentido del bien ... La mujer tiene el veneno de un áspid y la malicia de un dragón".- San Gregorio el Grande.
"La mujer es cabeza del crimen, arma del diablo. Su voz es el silbido de la serpiente. Cuando veáis una mujer, creed que tenéis presente, no un ser humano, ni una béstia, sinó al diablo".- San Antonio.
Pudiera añadir infinidad de citas más, pero se haría tarea larga e insoportable por lo enojosa.
Mas, pasaron ya los tiempos de esclavitud a que estaba sometida la mujer por toda esa falange de canallas, que no otro calificativo merecen.
Nosotros, los hombres de hoy, más francos y generosos que los de ayer, tendemos a respetar a la mujer cual se debe; queremos, pues que vengáis a ocupar vuestro puesto en el banquete de la vida como seres pensantes que sois, porque entendemos que vuestra obra de redención de la Humanidad sería incompleta sin vuestra ayuda.
Venid, pues, a compartir con nosotros las amarguras y alegrías de la vida.
Dejaos de lo que os dicen los curas, de Dios y de los santos, porque ya veis que lejos de haceros bien, lo que hacen es engañaros y vilipendiaros cuanto pueden.
MANIÖN
Hasta los más conspícuos padres de la Iglesia la dedicaban los insultos más soeces y la sometían a los escarnios más grandes.
Nadie ha hablado de la mujer como todos esos santos, a los cuales la mayoría de vosotros veneráis con gran respeto en esas casas conocidas por ... iglesias.
Y para que os forméis un pequeño juício de lo que, respecto a la mujer, opinaban los padres del cristianismo, copio varios de los más salientes de sus pensamientos:
"La mujer es el origen de todos los males, pues ella ha penetrado la muerte en el mundo".- San Jerónimo.
"Malo es ver a mujer alguna, peor hablarla y más tocarla".- San Agustín.
"Hombre de bien, huye de la mujer, sino eres perdido".- San Paulino.
"La mujer es un escorpión pronto siempre a picar ... Es la lanza del demonio",- San Buenaventura.
"Más difícil es hallar una mujer buena que un cuervo blanco".- San Gregorio.
"La mujer no tiene sentido del bien ... La mujer tiene el veneno de un áspid y la malicia de un dragón".- San Gregorio el Grande.
"La mujer es cabeza del crimen, arma del diablo. Su voz es el silbido de la serpiente. Cuando veáis una mujer, creed que tenéis presente, no un ser humano, ni una béstia, sinó al diablo".- San Antonio.
Pudiera añadir infinidad de citas más, pero se haría tarea larga e insoportable por lo enojosa.
Mas, pasaron ya los tiempos de esclavitud a que estaba sometida la mujer por toda esa falange de canallas, que no otro calificativo merecen.
Nosotros, los hombres de hoy, más francos y generosos que los de ayer, tendemos a respetar a la mujer cual se debe; queremos, pues que vengáis a ocupar vuestro puesto en el banquete de la vida como seres pensantes que sois, porque entendemos que vuestra obra de redención de la Humanidad sería incompleta sin vuestra ayuda.
Venid, pues, a compartir con nosotros las amarguras y alegrías de la vida.
Dejaos de lo que os dicen los curas, de Dios y de los santos, porque ya veis que lejos de haceros bien, lo que hacen es engañaros y vilipendiaros cuanto pueden.
MANIÖN
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