La anual
asamblea de dependientes del comercio y cuarta, desde la fundación de su Federación,
ha tenido efecto este año en la industriosa, ciudad de Mataró, por acuerdo de la
última asamblea celebrada en Tarrasa.
Se
verificó en el salón de actos del C. de D. del C. y de la I. de dicha ciudad, el pasado sábado
por la noche y el domingo por la mañana.
Abrió el
acto el presidente del comité ejecutivo don José Ricart Sala, acompañándole en
la mesa presidencial los miembros del mismo don Franco Marcet, de Sabadell,
secretario; don Francisco Terrafet, de Lérida, vicesecretario; don Juan
Garriga, de Barcelona, tesorero; don Isidro Jorba, de Tarrasa contador y don
José Brú, de Tarragona, vocal.
Después
de presentar las respectivas credenciales, los delegados asistentes,
representantes de los Centros de Lérida, Manresa, Mataró, Reus, Sabadell,
Tarragona, Tarrasa, Valls y de las entidades barcelonesas «C. A. de D. del C. y
de la I.» , «Unión
Ultramarina» y «Liga de Corredores y Representantes del Comercio», se pasa a
nombrar la mesa de discusión, siendo elegida a propuesta del delegado señor
Cortés, la siguiente: Presidente, don Francisco Lladó, de Mataró; secretario, don
Julio Figueras, de Tarrasa y vocales don David Ferrerons, de Barcelona; don
José M. Bonet, de Valls y don Ramón Sarrias, de Lérida.
El señor
Lladó dirige a los asistentes breve discurso de salutación, que es aplaudido.
Seguidamente
es leída y aprueba el acta de la asamblea anterior, así como una resumida memoria
del ejercicio 1923-24, ampliada verbalmente por el señor Ricart. También es aprobado
el estado de cuentas y el de caja durante el mencionado ejercicio.
Hace uso
de la palabra el señor Ricart, quien entera a los asambleístas de las
dificultades que han hecho difícil la actuación del comité actual y que puede
darse por solucionado el conflicto de Valls, completamente a favor de la dependencia.
A
propuesta del secretario señor Franco Marcet, se acuerda celebrar la asamblea
de 1925 en la ciudad de Lérida y, a petición del presidente de la Federación , el señor Lladó
levanta la primera sesión, para continuar la asamblea al día siguiente a las
diez de la mañana.
En la
hora indicada del domingo, se abre la segunda sesión con la asistencia de todos
los delegados de la anterior.
Se
acuerda dirigir al subsecretario del ministerio del Trabajo, señor Aunós, un
telegrama de salutación como reconocimiento de sus trabajos en pro de la
dependencia, siempre dentro de la más estricta ley, como ha actuado siempre la Federación , y más en los
momentos actuales.
Procédese
a nombrar el comité ejecutivo para el próximo ejercicio, siendo elegido por unanimidad
el siguiente:
Presidente,
don José Ricart Solé (reelegido); vicepresidente, don Francisco Terrafeta, de
Lérida (reelegido); secretario, don Abelardo Tona, de Barcelona;
vicesecretario, don Esteban Sans Colom, de Barcelona; Tesorero, don Julio
Figueras, de Tarrasa; contador, don José M. Bonet, de Valls y vocal, don Estanislao
Casas Huc, de Manresa.
Terminado
el orden del día, se pasa a la tramitación de las proposiciones presentadas por
las diferentes entidades adheridas, siendo unidas las proposiciones de los
centros de Barcelona, Manresa y Mataró, referentes a la constitución de
secciones mutualistas, quedando nombrado un comité compuesto de los tres
proponentes, los presidentes de los centros que ya lo tengan implantado y el de
los demás que lo deseen.
Por el
delegado de la Unión
Ultramarina de Barcelona, es combatido el régimen del internado,
contestando el presidente de la
Federación que gestionará este asunto hasta su completa
abolición.
Que la Federación espere el
criterio de los centros federados para solicitar su ingreso en la Federación Internacional
de empleados y técnicos, adherida a la Internacional Sindical
de Ámsterdam.
Tomáronse,
luego, los siguientes acuerdos:
Constituir
en las poblaciones que no existen, las comisiones mixtas, y procurar
representantes en los tribunales industriales. Dirigir un telegrama de
salutación a la
Central Nacional de Empleados de comercio españoles. Enviar
una instancia al poder pidiendo el levantamiento de la censura. Se faculta a la Federación para nombrar
un secretario de Relaciones internacionales, que, a petición de un delegado,
será elegido el señor Ráfols, de la Sección Permanente
de Organización y Trabajo del C. A. de D. del C. y de la I , de Barcelona.
Los
delegados señores Olivella y Ramos, pronuncian sendos discursos en pro de sus espíritus
unionistas; el señor Ricart, cree difícil la completa constitución del frente único.
Y no
habiendo más asuntos a tratar, el presidente de mesa don Francisco Lladó,
levanta la segunda y última sesión de la cuarta asamblea de la Federación de
Dependientes de Cataluña.
Fue
servido a los asistentes y prensa, un ágape, que transcurrió en la más franca amistad,
no faltando discursos.
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