miércoles, 22 de febrero de 2017

La Vanguardia, Edición del martes, 10 enero 1933, página 12

En Tarrasa

Un muerto y un herido

Según nos comunica nuestro corresponsal en Tarrasa, el domingo por la noche se produjeron en aquella ciudad graves y simultáneos sucesos en distintos sectores.

A las diez y media, cuando el guardia civil José González Aguilar se dirigía a su cuartel, al llegar a la autora, de la calle de San Isidro, fue sorprendido por un grupo de unos 15 individuos que, pistola en mano, le intimaron a poner las manos en alto. El guardia lejos de obedecer reaccionó valientemente e hizo fuego contra los revoltosos, matando a uno e hiriendo gravemente a otro, dándose los restantes a la fuga.

El muerto no pudo ser identificado por no encontrarse en su poder documento alguno y el herido es, José Rivera Mercader, de 27 años, y domiciliado en la calle del Infante Martín, número 42. Tanto en poder del interfecto como del detenido fueron halladas bombas y municiones abundantes.

Un grupo de unos 40 individuos se presentaba, simultáneamente al suceso anterior, en la zona militar y aprovechándose del escaso número de fuerzas que allí se alojan, asaltaron el edificio, obligando a abandonarlo al suboficial y tropa, a los que obligaron a trasladarse a la Rambla de Egara.

Además, en lugar próximo a la calle de Prat de la Riba, junto a las vías del Norte, hizo explosión un artefacto que causó algunos desperfectos que fueron rápidamente reparados, sin que el servicio sufriera el menor menoscabo.

Hubo tiroteo más o menos espaciado durante toda la noche, utilizando los revoltosos para ponerse en fuga diferentes autos.

Han sido cortadas las comunicaciones telegráficas y algunos hilos telefónicos.

En vista de la gravedad de la situación, el domingo por la noche no funcionó ningún espectáculo público en la ciudad de Tarrasa.

La guardia civil durante el día de ayer recogió armas y municiones que habían sido arrojadas por los revoltosos en su fuga.

Los detenidos hasta la noche de ayer por la guardia civil son: Andrés Rosell Canell, Tomás Mongueras Martín y, Ramón Vidal Buxé.

Las autoridades durante el día de ayer tomaron grandes precauciones para impedir la repetición de los sucesos de la noche anterior. Las Casas Consistoriales y los demás edificios públicos estuvieron durante todo el día custodiados pop la fuerza pública.


No hay comentarios: