De
tradicionalismo
EXCURSIÓN A
SAMALUS
Tal como se había anunciado, el Requeté de
Barcelona efectuó los días 18 y 19 del corriente la anunciada excursión al
término municipal de Samalús.
A las tres y media de la tarde, salieron los
expedicionarios hacia La Garriga, donde fueron recibidos por la Junta directiva
del Circulo Tradicionalista. De allí—después de adquirir comida para las
jomadas—se despidieron pronto y con paso firme se llegó a Samalús, donde
nuestro querido correligionario señor Riera nos recibió complacidamente,
trasladándonos a su casa, donde fuimos exquisitamente obsequiados y muy bien
atendidos por toda la familia, dando pruebas de una generosidad inconocida doña
María Marsá, viuda de Riera.
De allí nos fuimos seguidamente hacia la llanura de
Prades, hermosa y dilatada planicie, lugar ideal para el descanso de los
fogosos Requetés, que acudieron a aquella expedición tradicionalista.
Como era ya noche cerrada, el jefe de la excursión
ordenó rápidamente la instalación de las tiendas de campaña, que a las de
propiedad de nuestra sección excursionista se juntaron las galantemente
ofrecidas por nuestro correligionario don José María Cunill, de Tarrasa.
Transmitidas las oportunas órdenes, se montó un servicio de vigilancia;
quedando encargado de la misma don Francisco Ruiz. En la oscuridad de la noche,
el campamento producía el espectáculo de encontrarnos en campaña. Bajo la
majestad del silencio, rezamos el Santo Rosario, al igual que nuestros voluntarios
hacían en las guerras forales y carlistas de España. A las nueve el corneta
tocó a silencio. A las diez de la noche, acompañada por un guía, llegó una
segunda expedición, a la que se le dio el alto por nuestro centinela, y al
saberse que se trataba de correligionarios que venían a engrosar nuestro
campamento, se renovaron las muestras de compañerismo para pasar la noche.
A las seis de la mañana, el corneta tocó a diana e
inmediatamente principió la higiene particular, utilizando las fuentes de los
alrededores. La primera vanguardia de la sección del Requeté asistió a la
primera Misa, que a las seis celebra la iglesia parroquial. A las nueve de la
mañana, en correcta formación salimos de la llanura de Prades y nos dirigimos a
Samalús para oír el solemne Oficio, que se celebró en la citada parroquia. En
el mencionado acto tomó parte la sección coral de nuestra entidad. Durante esta
solemnidad religiosa quedaron de guardia en el campamento la sección de
vanguardia que ya habla cumplido sus deberes religiosos. La pequeña iglesia de
Samalús abrió sus puertas con el fin de que tan gran núcleo de Requetés
pudieran asistir a la solemnidad religiosa, aunque fuera desde la plaza.
De regreso al campamento nos vimos agradablemente
sorprendidos por el acompañamiento de nuevos Requetés, que no habiendo podido
asistir el sábado, vinieron a pasar el día en nuestra amigable compañía. La
comida se efectuó con gran compañerismo bajo el pinar que había al lado del
campamento.
A las cuatro de la tarde, emprendimos el regreso,
haciendo a la vez una visita al Centro Tradicionalista de La Garriga, en el que
recibimos finas muestras de amistad y nos obsequiaron con un espléndido
refresco. El ritmo y las boinas bermejas que cubrían nuestras cabezas, daban
una nota simpática a la población de La Garriga, y tanto por parte de la
población como de los veraneantes, se reflejaba en la cara de los transeúntes
vivas muestras de simpatía.
Muy complacidos de la excursión realizada, volvimos
a nuestros hogares y con esta ocasión mostramos nuestro agradecimiento a las
entidades Tradicionalistas de Sans, San Andrés, Vich, Rubí, Granollers, Tarrasa
y San Feliu de Llobregat, por la colaboración prestada.
—C.
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