lunes, 6 de noviembre de 2017

El Diluvio, Edición del miércoles, 9 de mayo 1934, página 21

Por sostener riña con otra mujer, la ciudadana Josefa Martínez Gómez, natural de Cartagena, con residencia en esta ciudad, Ramón Llull, número 112, tuvo que ser asistida de una herida en la región occipital en el Dispensario Municipal.

La niña de catorce meses Carmen Bach, natural de Granollers, sufrió quemaduras de primer grado en la barraca que en la feria tienen sus padres por haberse caído el fogón que para sus usos domésticos tenían.

Asimismo, se tuvo que prestar asistencia a Alfredo Boada, de cuarenta años, vecino de Viladecaballs, y a su hijo Martín, de ocho años.

Los dos sufrían fuertes heridas en la cabeza ocasionadas mientras presenciaban la marcha de un “carrousel”, pues en la vorágine del curso de rotación se desprendió una gruesa barra de hierro, cayendo encima del padre e hijo citados.


Sorprendidos fueron los jóvenes carlistas José Casamitjana, de diezy siete años y Pedro Burés de veintiuno, mientras ointaban en los discos de la circulación urbana los colores de la bandera borbónica, siendo detenidos por la policía y denunciados al Juzgado.

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