lunes, 2 de octubre de 2017

El Diluvio, martes 13 de marzo de 1934, página 5.

En Tarrasa estalla una bomba

El sábado, a las 7’45 de la noche, se oyó en toda la ciudad una fuerte detonación que sembró la alarma en la misma.

Efectivamente, en la casa número 10 de la calle Raval de Fermín Galán, domicilio lindante con el Juzgado de instrucción, hizo explosión una potente bomba que causó grandes destrozos.

La casa atentada es el domicilio de don Juan Massana, hermano de don Francisco Massana, asesinado vilmente hace tres semanas, la vista de cuya causa contra Antonio Marín, supuesto autor de dicho asesinato, se verificó en la Audiencia, decretando su inmediata libertad.

El artefacto había sido colocado en el zaguán de dicho domicilio, produciendo su explosión gran destrozo de muebles, tabiques y puertas.

El primero en llegar al lugar del suceso fue el regidor consejero de Gobernación, señor Petchamé, que procedió, auxiliado de amigos y transeúntes, a prestar asistencia a los heridos, recogiendo de entre los escombros a don Tomás Bosch, padre político de don Juan Massana, que presentaba algunas heridas de carácter leve, y la señorita Ana Estruch, de 19 años, que presentaba heridas contusas en la espalda derecha, tórax y herida interna en el codo.

También resultó herido el transeúnte Emeterio Ibáñez, de 23 años, que en el momento de la explosión pasaba por aquel lugar.

En el Dispensario médico le apreciaron la fractura de la escápula derecha y fuerte contusión en la parte posterior del tórax.

Asimismo, fue asistida Dolores Gómez, de 20 años, de una erosión contusa en la región glútea izquierda y herida en la mano.

En el domicilio particular del doctor Lorenzo fue asistido el hijo del propietario de la casa atentada, don José Massana, que presentaba heridas contusas en el muslo derecho y erosiones en diferentes partes del cuerpo.

Fue muy casual que del atentado no resultaran mayor número de heridos teniendo en cuenta que en la hora de la explosión la calle Raval de Fermín Galán estaba extraordinariamente concurrida.

En el lugar del cobarde atentado acudieron las primeras autoridades municipales, señores Morera, Armengol, Palet, Puigdoménech, Petxamé y numerosos concejales.


No hay comentarios: