«Amics deis Museus de Catalunya»
El domingo por la
mañana, buen número de componentes de Amigos de los Museos de Cataluña, se
trasladaron a Tarrasa para visitar las iglesias románicas allí existentes,
siendo acompañados por el arqueólogo don Rafael Benet, que ilustró la visita
con una interesantísima conferencia referente a la historia artística de la
vieja Egara, en que prodigó datos y explicaciones llevando a los excursionistas
a un completo conocimiento de las bellezas artísticas y arqueológicas, motivo
de la visita. Refirió se, en primer término, a la evolución que experimentó
esta pequeña localidad en la época romana, que en el año 450 fue elevada a la
categoría de obispado, y ya en el 614 albergó un Concilio. Dijo que la catedral
se cree fue construida en tiempos del obispo Nebridius que rigió la diócesis de
516 a 546. Este obispado desapareció en el siglo VIII con la invasión
musulmana. En la iglesia parroquial del Santo Espíritu hizo remarcar las
airosas naves bendecidas en 1621, que son un hermoso ejemplar. El altar del
Rosario, de que fue autor Agustín Pujol, y data de la primera mitad del siglo
XVII, añadiendo que este autor lo es también de muchos otros altares catalanes
del Rosario, entre los que se ha de señalar el magnífico que existe en la
iglesia parroquial de Sarria. El altar mayor, de Juan Mompó es del siglo XVIII.
Llamó la atención de los visitantes acerca del altar del Santo Cristo, obra de
Pedro Serra, en 1670, y restaurado en 1885. Siguió luego la visión del Cristo
Yacente, de Martini Ditz de Liatzasolo, junto con las estatuas de María Cleofé
y María Salomé. En la iglesia de San Pedro, hizo ver la belleza del ábside. Se
extendió luego en la consideración de las opiniones emitidas por el señor Puig
y Cadafalch acerca de la influencia visigótica de este monumento y de la importancia
que revisten las excavaciones que se realizan bajo la competente dirección del
señor Bosch Gimpera, Se refirió, asimismo, a las pinturas del ábside de San
Pedro y a la escena del Mar Rojo, y también al detalle de los evangelistas del
siglo X, así como también, a las pinturas románicas de los siglos XII, XIV y XV
que se admiran en la citada iglesia de San Pedro, sin olvidar los retablos de
Luis Borrassá, y un San Miguel de autor desconocido .
Los excursionistas
escucharon con verdadera complacencia la autorizada palabra del señor Benet.
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