EL RENACIMIENTO DE ARAGÓN
En el Centro Aragonés de Tarrasa, dio
su anunciada conferencia don J. Calvo Alfaro, presidente de Unión Aragonesista,
sobre el tema, «Por el renacimiento de Aragón».
Comenzó por reseñar el proceso de
acontecimientos históricos que han llevado a Aragón al estado actual, afirmando
que es curioso observar que tal proceso de decadencia es paralelo al de la
decadencia de España, ya que Aragón pasó de ser una potencia internacional a un
país despoblado. Explica tal semejanza, en el proceso de anulación de las
vitalidades regionales, de lo que habían constituido verdaderos Estados, para
reforzar, no el principio de nacionalidad española, sino el de absolutismo,
frente a las fuentes de vitalidad de lo que podía hacer sido el gran Estado
español.
Posteriormente, una vez que Aragón
dejó de existir y se consumó su sacrificio, la soberanía centralista pasó de
manos de los monarcas a las del estamento gubernamental, y se educó al pueblo
con la doctrina de la renunciación, matando en 61 todo ideal de renacimiento.
La historia de la decadencia de
España es la historia de la decadencia de sus Estados regionales, ya que cuando
las colectividades no se sienten animadas por ese entusiasmo de emulación y
sacrificio, los pueblos agonizan atacados del peor de los males: la
indiferencia.
Es curioso observar que los síntomas
de renacimiento se producen, en España, en aquellas regiones de personalidad
acusada, como Valencia, Galicia, Vasconia, Cataluña y Aragón. Lo que precisa es
que este sentimiento renacentista se enfoque quitándole todo virus de odio,
pero no extirpando tales ideales, porque en ellos está el porvenir de España.
Refiriéndose a Aragón, dijo que hay
que inspirar en el pueblo un sano optimismo, no que se limite a cantar glorias
pretéritas, sino que se apreste a la labor ardua y hasta ingrata de
reconquistar el alma de Aragón.
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