LA COLUMNA DE BARCELONA
PASA POR LERIDA, CAMINO DE ZARAGOZA
LERIDA 25. — El paso del convoy que marcha a Zaragoza es
acogido en todos los pueblos con fervorosas manifestaciones de entusiasmo. En
Sabadell y Tarrasa la población de ambas ciudades se movilizó para saludar a la
columna, distribuyendo las mujeres entre los expedicionarios víveres, tabaco y
cántaros de agua fresca. Igualmente, en Cervera, Tárrega. Bellpuig. Belloch
etcétera, hombres y mujeres esperaban en las estaciones.
La multitud, con los puños en alto, daba voces de aliento y
vitoreaba a los expedicionarios. El espectáculo era impresionante al paso del
tren entre viñas, montes y olivares. En todas partes los bravos milicianos
recibían el clamor unánime de la muchedumbre, que daba vivas a la libertad y a
la República.
Además, en las carreteras, puentes, pasos a nivel, etc, se
veían hombres armados y milicias entusiasmadas.
La moral de los expedicionarios es extraordinaria. Cuando se
habla entre ellos de la lucha próxima para conquistar Zaragoza algunos dicen
que si mueren los cubran con la bandera republicana, mientras otros dicen: «A mí,
con la socialista.»
Los expedicionarios llegaron de madrugada a Lérida, donde se
les hizo un recibimiento calurosísimo.
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